Ha muerto Pepe, yo así lo conocía por solo su nombre, para casi todos los compañeros de bridge el esposo de Pilar Molina
Lo veíamos en la sala todos los días que Pilar venia a jugar, era el fiel retrato de la abnegación, un hombre serio,servicial y no por ello falto de carácter, desde mi perspectiva, trasmitía una sensación de seguridad a Pilar que para los compañeros de ésta, entre los que me encuentro resultaba muy tranquilizador.
Pondría mil ejemplos de la disposición de Pepe para resolver cualquier problema,situación o necesidad de Pilar, desde un día de lluvia y voy saco el coche y vengo a por ti, hasta una tarde que la merienda no ha llegado y a los 15 minutos aparecía él con el problema resuelto.
Desde aquí mi más sentido pésame para Pilar y familia
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